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29/01/2007, Cooperativas Agro-alimentarias
Exigen al Gobierno que excluya el vino de la futura "Ley de prevención del consumo de bebidas alcohólicas por menores".
El conjunto del sector vitivinícola español, representado por las organizaciones profesionales agrarias ASAJA, COAG y UPA, la Confederación de Cooperativas Agrarias de España (CCAE) y las asociaciones empresariales FEV y AVIMES mostramos una gran preocupación por los efectos negativos que tendría en el sector la aplicación de las intenciones planteadas por el Ministerio de Sanidad en el borrador del “Anteproyecto de Ley de medidas sanitarias para la protección de la salud y la prevención del consumo de bebidas alcohólicas por menores”. La aprobación de dicha norma ocasionaría graves perjuicios al sector.
Aún siendo conscientes del problema del alcoholismo en los jóvenes y apoyando la necesidad de adoptar iniciativas que pretendan encontrar soluciones, no podemos aceptar determinadas medidas planteadas en el borrador de Ley, tales como la intromisión a la libertad por parte de los adultos en el acceso y consumo de vino, la limitación en la promoción y publicidad o las restricciones al uso de marcas, por poner algunos ejemplos.
El sector ha elaborado un manifiesto con el título “Por la defensa de la Viña y el Vino”, presentado esta mañana en rueda de prensa, manifiesto que se va a difundir por todo el Estado con el objetivo de buscar el apoyo de la mayor parte de la sociedad. Según las organizaciones representadas, el vino no debe considerarse como un simple bien de consumo, es un valor de nuestra civilización y un índice de la calidad de vida. Constituye un elemento básico y una de nuestras señas de identidad desde el punto de vista histórico, cultural, social y territorial, aparte de sustentar la economía y el tejido socioeconómico en numerosas comarcas de nuestro territorio.
Hay que resaltar la gran trascendencia socio-económica que la viña y el vino tienen en España, ya que lo sustentan más de 400.000 explotaciones agrarias, en una superficie de alrededor de 1,2 millones de hectáreas (el país con mayor superficie de viñedo del mundo), sosteniendo más de 30.000 empleos directos en la transformación y la comercialización, y más de otros 30.000 empleos indirectos en sectores económicos complementarios.
Además, el cultivo del viñedo está integrado en el medio natural (protector ante la erosión de suelos, configurador de un paisaje característico y elemento de lucha contra el cambio climático) y el vino está reconocido como alimento en la Ley de la Viña y el Vino, ligado a la dieta mediterránea y con innumerables ventajas sanitarias. Desde 1990 numerosos estudios médico-científicos han revelado que las personas que consumen cantidades moderadas y regulares de vino presentan incidencias muy inferiores en diversas enfermedades, especialmente las cardiovasculares.
No podemos entender la relación entre vino y temas de alcoholismo, cuando en España el consumo de vino ha descendido de una manera acelerada y considerable, pasando de más de 70 a 26 litros por persona en menos de tres décadas. Esta realidad es paradójica frente a un incremento de los problemas derivados del alcohol, y especialmente entre la juventud entre los que el vino no es, precisamente, la bebida protagonista.
En definitiva, planteamos que el vino no es el problema y, por tanto, no debe vincularse con el problema social que supone el consumo abusivo del alcohol entre los jóvenes. Bien al contrario, las mismas pautas de moderación y consumo controlado, dentro de una dieta equilibrada, que se dan en el vino, deben servir de ejemplo frente a otros desórdenes y consumos inadecuados de alcohol. La información, la educación y la formación sobre la cultura del vino desembocan en una prevención natural que es la mejor forma de atajar el riesgo de abuso de su consumo. Por ello, “el conocimiento de la cultura del vino es la solución”.
Como conclusión, el manifiesto pretende buscar apoyos entre instituciones, entidades, organizaciones, colectivos y personas con el objetivo de que se reconozca la especificidad del vino y reclamar su exclusión de la propuesta normativa, en base al conjunto innumerable de valores positivos que posee.